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Los monumentos son símbolos que sirven para homenajear a un personaje o para recordar acontecimientos que marcaron la historia del país. Entre ellos estan:
El monumento al Divino Salvador del Mundo está ubicado en la capital de El Salvador, San Salvador, específicamente en la Plaza de las Américas, que es también conocida como Plaza del Salvador del Mundo, al final de la Alameda Roosevelt. Este monumento que se considera como un símbolo nacional, está compuesto por la figura de Cristo sobre un globo terráqueo montado sobre un pedestal de unos 18 metros de altura.
El Monumento a la Revolución, mejor conocido como “El Chulón”, es un ícono salvadoreño de los más representativos. Esta gigantesca obra de arte sobresale en el camino que recorre la Avenida La Revolución, ubicada en la Colonia San Benito, del municipio de San Salvador.Se construyó en el año 1955, mientras el Coronel Óscar Osorio fungía de Presidente de la República (1950-1956). Su develación fue hecha para conmemorar el movimiento revolucionario del 14 de diciembre de 1948, cuando se derrotó al General Salvador Castaneda Castro y culminó con la Constitución Política de 1950.
El Monumento a la Constitución, mejor conocido como “La Chulona” (porque no tiene ropa) es un monumento muy famoso entre los salvadoreños, especialmente los capitalinos.Este monumento simboliza el valor de la constitución salvadoreña en un momento crucial de la historia del país, nos referimos al momento en que los Acuerdos de Paz estaban a punto de concluir. Por lo tanto este monumento fue inaugurado en octubre del año 1991.La obra es una exquisita pieza de arte, una mujer que representa la justicia con los ojos cerrados en vez de tenerlos vendados, lo que significa que es imparcial a la hora de hacer justicia. El monumento fue esculpido por Rubén Martínez y tiene una altura aproximada de 2.85 metros con un peso de mil libras. Como nota interesante, el señor Rubén Martínez también es el autor de otras obras como por ejemplo, el Cristo de la Paz, en la carretera al Aeropuerto Internacional de Comalapa.
Monumento a Gerardo Barrios.
Localizada en el corazón de San Salvador, la estatua del prócer Gerardo Barrios es un punto de referencia dentro del casco del Centro Histórico capitalino. Fue develada en 1909, en el mismo sitio que rodea construcciones emblemáticas tales como el Palacio Nacional y la Catedral Metropolitana actualmente.El escultor Francisco Durini fue el creador de dicha pieza elaborada de bronce que lo muestra sobre una estatua ecuestre militar. Está colocada sobre un pedestal de granito que, a sus costados, muestra escenas de batallas de la época y el escudo nacional de El Salvador.Históricamente en este lugar se han dado lugar importantes acontecimientos como los disturbios que se generaron durante el funeral del arzobispo Óscar Arnulfo Romero asesinado en 1980 y la celebración del fin de la Guerra Civil en febrero de 1992.
El Divino Salvador del Mundo.
El monumento al Divino Salvador del Mundo está ubicado en la capital de El Salvador, San Salvador, específicamente en la Plaza de las Américas, que es también conocida como Plaza del Salvador del Mundo, al final de la Alameda Roosevelt. Este monumento que se considera como un símbolo nacional, está compuesto por la figura de Cristo sobre un globo terráqueo montado sobre un pedestal de unos 18 metros de altura.
Monumento a la Revolución.
El Monumento a la Revolución, mejor conocido como “El Chulón”, es un ícono salvadoreño de los más representativos. Esta gigantesca obra de arte sobresale en el camino que recorre la Avenida La Revolución, ubicada en la Colonia San Benito, del municipio de San Salvador.Se construyó en el año 1955, mientras el Coronel Óscar Osorio fungía de Presidente de la República (1950-1956). Su develación fue hecha para conmemorar el movimiento revolucionario del 14 de diciembre de 1948, cuando se derrotó al General Salvador Castaneda Castro y culminó con la Constitución Política de 1950.
Monumento a la Constitución.
El Monumento a la Constitución, mejor conocido como “La Chulona” (porque no tiene ropa) es un monumento muy famoso entre los salvadoreños, especialmente los capitalinos.Este monumento simboliza el valor de la constitución salvadoreña en un momento crucial de la historia del país, nos referimos al momento en que los Acuerdos de Paz estaban a punto de concluir. Por lo tanto este monumento fue inaugurado en octubre del año 1991.La obra es una exquisita pieza de arte, una mujer que representa la justicia con los ojos cerrados en vez de tenerlos vendados, lo que significa que es imparcial a la hora de hacer justicia. El monumento fue esculpido por Rubén Martínez y tiene una altura aproximada de 2.85 metros con un peso de mil libras. Como nota interesante, el señor Rubén Martínez también es el autor de otras obras como por ejemplo, el Cristo de la Paz, en la carretera al Aeropuerto Internacional de Comalapa.Reloj de Flores.
El emblemático Reloj de Flores se construyó en 1971 y según algunos historiadores se pensó en un monumento que le daría la bienvenida a todos los visitantes que entraban por la zona oriental a la capital.El Reloj de Flores fue inaugurado un miércoles 29 de abril del referido año, y desde entonces se pensó en que se convertiría en un lugar muy vistoso, que además de dar la hora exacta causaría la mejor impresión de la ciudad, por lo que no se escatimaron esfuerzos.El mecanismo para su funcionamiento fue importado desde Francia y costó 15 mil colones, unos 6 mil dólares, en aquella época.
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